Segunda a los Corintios 12:1-21
Notas
Notas de estudio
un hombre. Pablo no dice cómo se llama el hombre que tuvo esta visión sobrenatural. Pero el contexto respalda fuertemente la idea de que está hablando de sí mismo. Al defenderse de opositores como los “superapóstoles”, que cuestionaban su condición de apóstol (2Co 11:5, 23), presenta como prueba las “visiones sobrenaturales y revelaciones del Señor” que él había recibido (2Co 12:1). En vista de que la Biblia no habla de ninguna otra persona que tuviera esa experiencia, es lógico llegar a la conclusión de que el hombre que se menciona aquí es el propio Pablo.
tercer cielo. En las Escrituras, la palabra cielo se usa con distintos significados. Puede referirse tanto a los cielos físicos como a los cielos espirituales, que es donde viven Jehová y sus ángeles (Gé 11:4; Is 63:15). Pero también puede referirse a un gobierno, ya sea de los hombres o de Dios (Is 14:12; Da 4:25, 26). Al parecer, Pablo está hablando aquí de una revelación de algo futuro, una revelación que recibió mediante una visión (2Co 12:1). A veces, la Biblia usa el número tres o repite las cosas tres veces para añadir intensidad o fuerza (Is 6:3; Eze 21:27; Ap 4:8). Así que todo parece indicar que el “tercer cielo” que vio Pablo es el mejor gobierno posible, el Reino mesiánico de Dios, que es el gobierno celestial formado por Jesucristo y los 144.000 que reinarán con él (Is 65:17; 66:22; 2Pe 3:13; Ap 14:1-5).
paraíso. La palabra griega parádeisos aparece tres veces en las Escrituras Griegas Cristianas (Lu 23:43 y la nota de estudio; 2Co 12:4; Ap 2:7). Hay términos similares tanto en hebreo (pardés, en Ne 2:8; Ec 2:5; Can 4:13) como en persa (pairidaeza). Los tres términos transmiten la idea básica de un hermoso parque o un jardín semejante a un parque. En este contexto, la palabra paraíso puede referirse a varias cosas (ver la nota de estudio de 2Co 12:2). Pablo puede estar refiriéndose 1) al Paraíso literal que habrá en la tierra, 2) al ambiente espiritual del que disfrutará el pueblo de Dios en el nuevo mundo y 3) a la situación en el cielo. En el nuevo mundo, los tres paraísos existirán al mismo tiempo. Pablo dice que “a ningún hombre le está permitido” hablar de esas cosas. En sus días esto era así porque aún no había llegado el tiempo de que Dios revelara los detalles sobre cómo se iría cumpliendo su propósito.
de ese hombre. O quizás “de eso”, refiriéndose a esa experiencia. Ver la nota de estudio de 2Co 12:2.
maravillosas. Aquí Pablo usa el término griego hyperbolḗ para hablar del carácter maravilloso o extraordinario de las revelaciones que había recibido (ver la nota de estudio de 2Co 12:2). Este término aparece ocho veces en las Escrituras Griegas Cristianas, siempre en las cartas de Pablo. Se traduce de distintas formas según el contexto. Por ejemplo, en 2Co 4:7 se emplea para describir “el poder que va más allá de lo normal”, y en 2Co 1:8, para hablar de la “presión tan grande” que sufrían Pablo y sus compañeros.
una espina en la carne. Aquí Pablo usa una metáfora para describir un sufrimiento continuo. Una espina clavada en el cuerpo es una causa de dolor constante. (El término griego que se traduce como “espina” se refiere a ‘cualquier cosa con punta’, como una estaca puntiaguda, una astilla o una espina). Pablo no aclara si el dolor del que habla es físico o emocional. En sus cartas hace algunas declaraciones que podrían indicar que tenía problemas con la vista, algo que le habría dificultado viajar, escribir cartas y realizar su ministerio (Gál 4:15; 6:11; ver también Hch 23:1-5). Ahora bien, como en este contexto está hablando de los ataques constantes de los falsos maestros, también podría referirse al estrés y la ansiedad que le producían aquellos arrogantes enemigos (ver la nota de estudio de 2Co 11:5). Fuera cual fuera la causa del dolor, Pablo la llama “un ángel de Satanás”. De esta manera, da a entender que Satanás se aprovecha de cualquier sufrimiento, tanto físico como emocional, para desanimar a los siervos de Dios. Sin embargo, Pablo mantiene una actitud positiva ante esta prueba: ve la “espina” como algo que evita que se “llene de orgullo”, algo que lo ayuda a mantenerse humilde y seguir agradando a Dios (Mt 23:12).
abofeteándome. O “golpeándome”. Aquí Pablo usa un verbo griego que podría referirse a golpear literalmente con la mano, los nudillos o el puño. Se usa con este sentido en Mt 26:67, donde se dice que los soldados romanos “le dieron puñetazos” a Jesús. En 1Co 4:11 se emplea con el sentido más amplio de tratar con dureza.
al Señor. Pablo aquí usa la expresión griega ton Kýrion (“al Señor”). Esta expresión se refiere algunas veces a Jehová, y otras a Jesús. En este caso es lógico pensar que Pablo dirigió sus súplicas tres veces al Señor Jehová, “el que escucha las oraciones” (Sl 65:2). Es a él a quien se deben dirigir todas las oraciones (Sl 145:18; Flp 4:6). Además, en la respuesta que recibe Pablo, se mencionan la “bondad inmerecida” y el “poder”, cosas que Jehová da con generosidad a sus siervos (2Co 12:9; Is 40:26; Lu 24:49). Algunos especialistas señalan que en el versículo 9 Pablo también menciona “el poder del Cristo”. Sin embargo, esa frase no implica que él dirigiera sus súplicas a Cristo. Es cierto que Jesús tiene poder, pero lo recibe de Jehová, que es el origen de todo poder divino (Lu 5:17).
insensato. Ver la nota de estudio de 2Co 11:1.
cosas impresionantes. O “portentos presagiosos”. Ver la nota de estudio de Hch 2:19.
la tercera vez. Pablo no está diciendo aquí que visitó la ciudad de Corinto tres veces, sino que estuvo “listo” para visitarla tres veces. Tenía la intención de ir, pero no siempre tuvo las circunstancias apropiadas. La primera vez estuvo en Corinto, fundó la congregación y se quedó allí un año y medio (Hch 18:9-11). La segunda vez quiso ir pero no pudo (2Co 1:15, 16, 23). Todo indica que pasó muy poco tiempo entre la primera carta inspirada a los corintios y la segunda. Ese periodo sería demasiado corto para hacer una visita. Además, el libro de Hechos menciona una única visita (Hch 18:1). Ahora bien, la tercera vez se refiere a la visita que se menciona aquí y en 2Co 13:1, 2 y que Pablo sí consiguió realizar. Él viajó a Corinto alrededor del año 56 de nuestra era, y allí escribió el libro de Romanos (Hch 20:2, 3; Ro 16:1, 23; 1Co 1:14).
por ustedes. O “por sus almas”. Aquí el pronombre “ustedes” se usa para traducir una expresión griega que significa ‘las almas de ustedes’. En este contexto, la palabra psykhḗ, que tradicionalmente se traduce como “alma”, se refiere a las personas. Por eso aquí se traduce con un pronombre. Ver glosario, alma.
chismes. O “murmuraciones”. El término griego da la idea de comentarios que se hacen en secreto o de manera confidencial y que difunden rumores o información negativa. Esta es la única vez que aparece este término en las Escrituras Griegas Cristianas. Pero se usa una palabra relacionada, que se traduce como “chismosos”, en una lista de prácticas malas en Ro 1:29 (ver la nota de estudio). Además, en la Septuaginta se emplea con un sentido negativo el verbo griego de la misma familia en 2Sa 12:19 y Sl 41:7 (40:8, LXX). En estos versículos se traduce como “cuchichear” y “susurrar”.
impureza. O “inmundicia”. En este versículo se mencionan tres expresiones: “impureza”, “inmoralidad sexual” y “conducta descarada”. De las tres, “impureza” (en griego, akatharsía) es la que tiene un significado más amplio. Literalmente describe algo impuro o sucio (Mt 23:27). En sentido figurado abarca cualquier clase de impureza, sea en asuntos sexuales, en lo que se dice, en lo que se hace o en temas religiosos (comparar con 1Co 7:14; 2Co 6:17; 1Te 2:3). La “impureza” puede referirse a distintos tipos de mala conducta y tener diversos grados de gravedad (Ef 4:19). Esta expresión destaca el carácter repugnante del mal comportamiento y del estado en que queda la persona que tiene ese comportamiento. Ver el glosario, impuro, y la nota de estudio de Gál 5:19.
inmoralidad sexual. En griego, pornéia. Esta expresión general se usa en la Biblia para referirse a algunas prácticas sexuales prohibidas por Dios. Incluye el adulterio, las relaciones sexuales entre personas no casadas entre sí, los actos homosexuales y otros pecados sexuales. Ver el glosario y la nota de estudio de Gál 5:19.
conducta descarada. O “conducta desvergonzada”. La palabra griega asélgueia se refiere a acciones que son una violación grave de las leyes de Dios y que reflejan una actitud descarada o atrevida e insolente. Ver el glosario y la nota de estudio de Gál 5:19.